Según un estudio científico publicado por la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, “se han observado síntomas neurológicos en algunos pacientes” que demuestran que el virus SARS-CoV-2 es capaz de infectar a las células del plexo coroideo, estructuras vasculares del encéfalo encargadas de formar el líquido cefalorraquídeo que sirve de protección al sistema nervioso central.
Esta infección se manifiesta con dolor de cabeza, convulsiones, confusión, psicosis, e infecciones como meningitis/encefalitis. Estos síntomas pueden indicar tropismo viral por las células cerebrales o pueden deberse a efectos más indirectos como resultado de la inflamación sistémica.
Los hallazgos se dieron tras una autopsia en la que “se demostró la presencia de virus en el cerebro de algunos pacientes. Sin embargo, aún no se conoce la prevalencia de la infección del sistema nervioso central (SNC) y la presencia viral en el cerebro”.
Según explica la Red Global MX, cuando “la ruptura en la barrera de sangre-líquido cerebroespinal es debido a la muerte de las células que la componen y a la posterior inflamación del tejido nervioso, ya que se infiltran células y moléculas del sistema inmune. Por lo tanto, el SARS-CoV-2 puede afectar de manera secundaria al sistema nervioso central, siendo la causa principal de estos síntomas”.
Se sabe que el SARS-CoV-2 solo infecta a las células que poseen como receptor la enzima convertidora de angiotensina 2 (ACE2). Mediante este estudio “se comprobó que las células en el sistema nervioso central que poseen ACE2 son las células epiteliales del plexo coroideo, cuya función es producir el líquido cerebroespinal del sistema nervioso central”.
El estudio concluye que “entre las alteraciones neurológicas observadas en este y en brotes anteriores de CoV, se han observado fatiga crónica y alteraciones del sueño no reparadoras”.
Además, “sugieren que los síntomas neurológicos no se deben a un efecto directo sobre las neuronas, sino a una consecuencia del daño a esta importante barrera”.